La Liga Mexicana de Béisbol (LMB) arrancó su campaña 2024 con dos nuevos clubes, Dorados de Tijuana y Conspiradores de Querétaro, y crece hasta 20. Una expansión que abrió nuevas plazas y nadie la ha comenzado a aprovechar más que los dominicanos.
De los 638 jugadores que comenzaron en nómina de 32 hombres hay 318 mexicanos y 320 extranjeros. Los quisqueyanos encabezan esa lista de importados con 93, seguido de los Estados Unidos (91), Venezuela (66), Cuba (22), Puerto Rico (13), Colombia (9), Panamá (7) y Curazao (4).
Los clubes deben tener un mínimo 20 mexicanos en su roster ampliado, que llega hasta 38 jugadores. En este grupo se consideran como local tanto a los peloteros nacidos en México como aquellos con doble nacionalidad o naturalizados, como el jardinero dominicano Rainel Rosario.
Un circuito que además comenzaron en el banquillo Félix Férmín (Tecolotes de Dos Laredos), José Offerman (Conspiradores) y Rafael Rijo (Bravos de León), además de los coaches Francisco Morales, Jordan Norberto, Luis Polonia, José Núñez, Carlos Pérez y Leyson Séptimo.
Las figuras
Más allá de las novedades de Robinson Canó o la vuelta de Zoilo Almonte (en su cuarta parada en suelo azteca), entre las plantillas sobresalen figuras con paso reciente o perspectivas de Grandes Ligas.
Es el caso de Nomar Mazara, que a sus 28 años parece haber salido del radar de la MLB. Caso similar es el de Jerar Encarnación, de 26 años y que en 2022 tuvo paso fugaz por la MLB, o Micker Adolfo.
En los rosters aparecen nombres regulares de la Lidom como Junior Lake, Aderlin Rodríguez, Luis Barrera, Gustavo Núñez, Jonathan Villar, Francisco Peña, Arismendy Alcántara, Cristhian Adames, Jorge Bonifacio, Wendell Rijo, Francisco Peguero, Andretty Cordero, Carlos Franco, Webster Rivas, Dawel Lugo y Yairo Muñoz.
Entre los lanzadores aparecen César Valdez, Radhamés Liz, Esmil Rogers, Fernando Abad, Gabriel Ynoa, Chester Pimentel, Henry Sosa, Ulises Joaquín y Keury Mella.
Es un circuito donde, de acuerdo a reportes de prensa, el pago mensual va desde los US$4 mil hasta los US$24 mil. Los clubes aprobaron un tope salarial que llegaría hasta los US$530,800, pero con mucha flexibilidad.
FUENTE: DIARIO LIBRE